Ha finalizado
el mes de mayo, llamado de la flores y también de la Virgen, en el que niños y
niñas reciben la primera comunión y los pocos agricultores y ganaderos que
quedan en la villa, festejan a San Isidro, patrono de ese mismo gremio, que fue
el más importante de entre todas las profesiones que tuvo Mansilla en toda su historia.
El día de San
Isidro es ya tradicional que se vaya en procesión con el Santo desde la
parroquia, cantando la letanía de los Santos hasta el campo, donde el sacerdote
bendice los panes, para concluir la ceremonia con la misa cantada en la ermita
de la Patrona. Pero, sin entrar en disquisiciones, queremos recordar que no
siempre fue así, hasta hace algunos años la bendición de los campos con el
canto de la letanías se celebraba en Mansilla el día 6 de Mayo, festividad de
“San Juan ante portam latinam”. Mi pregunta es: ¿quién dispuso y porqué se
cambió una tradición secular heredada de nuestros mayores?
F.Llorente
Fotos Toño Ceballos
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